Reseña del libro "SIN ECUACIONES, por favor"
Hay mucha belleza en el mundo natural: los tonos azules en el cielo del alba, el cielo nocturno repleto de estrellas, las puestas de Sol, impresionantes paisajes, las piedras preciosas, el colorido y variedad de la vegetación y del reino animal, el canto de los pájaros, la música, tantas cosas que generan en nosotros agradables e intensas y diversas emociones; y por si esto fuera poco, cuando se estudian las estructuras que contiene, para intentar descubrir cómo funciona todo, se descubre otro tipo de belleza, oculta, como la belleza oculta de las piedras preciosas que hay en el interior de una geoda, como la belleza de las amatistas; se desvela una armonía y coordinación que nos asombra; y es esa armonía, ese funcionamiento coordinado, esa interrelación entre las partes de las estructuras del mundo, lo que expresan de manera simbólica las fórmulas matemáticas cuando se están aplicando al estudio de la naturaleza.Esas hermosas relaciones que se van desvelando poco a poco, se pueden también describir en lenguaje que todo el mundo pueda entender, y de hecho se hace, y es bueno que se haga; pero son tan complejas e intrincadas que no es fácil hacerlo; además, hasta los mismos especialistas en los diferentes campos de estudio, y en particular los que se dedican al que se suele decir que es la ciencia de la naturaleza más fundamental, la física, todavía luchan por entender ellos mismos el significado profundo de relaciones descubiertas haciendo experimentos, que pueden expresar con fórmulas matemáticas (fórmulas empíricas, derivadas de los resultados experimentales), pero qué es lo que nos revelan sobre la naturaleza de la realidad?: se vislumbran ideas de una belleza sublime, pero todavía no se ha llegado al fondo, y ni siquiera se sabe si se llegará alguna vez, lo cual a muchos de ellos no les preocupa, porque la investigación misma es fascinante, y no se dejan de hacer descubrimientos, pero casi siempre llegan acompañados de nuevas preguntas; entender las matemáticas, comprender las ingeniosas y profundas relaciones que se descubren en la naturaleza, representadas por las expresiones matemáticas, proporciona el camino más directo, el mejor acercamiento posible, para captar esa "belleza oculta".Es bueno saber que también hay libros de divulgación sobre las matemáticas mismas; se pueden comprender las matemáticas sin utilizar símbolos y ecuaciones?; se puede dar una respuesta afirmativa a la solicitud que hizo Faraday, y de la que muchos hoy se harían eco?: "Sin ecuaciones, por favor".
